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-Las alegaciones de EQUO y del exconcejal José Otto Oyarbide son las únicas que se han presentado

El partido verde EQUO Cantabria ha presentado alegaciones al proyecto de parque acuático del cuaternario, denominado «Equipamiento deportivo y de ocio en Sierrallana».

EQUO considera que el proyecto ‘incumple la legalidad urbanística’, tanto la ley del Suelo de Cantabria como el propio Plan General de Ordenación de Torrelavega.

Como cuestión previa EQUO Cantabria plantea en su escrito ‘serias dudas sobre la titularidad del proyecto’.

‘No se entiende, dice EQUO en su escrito, que siendo el Ayuntamiento de Torrelavega el dueño de los terrenos en los que se ubica el complejo deportivo y de ocio de Sierrallana, sea un particular el que aparezca en el expediente como promotor y quien presente el documento ambiental para que sea tramitado el Ayuntamiento. Entiende la formación ecologista que si el Ayuntamiento es titular del proyecto y la iniciativa en el desarrollo del mismo es pública no ha lugar a que ningún particular se arrogue la elaboración del documento ambiental’.

“No nos consta”, dice el escrito de alegaciones, “que se haya procedido a la enajenación o concesión de los terrenos en de Sierrallana en los que se ubica el equipamiento, y no parece prudente que el Ayuntamiento esté tramitando el desarrollo de un proyecto con la consiguiente aprobación del trámite ambiental (es decir, utilizando recursos públicos), si el promotor va a ser una empresa privada de la que ya conocemos su denominación”.

EQUO Cantabria considera que esta es una cuestión de máxima importancia que debe aclararse antes de la tramitación de este proyecto, so pena de ‘incurrir en responsabilidades administrativas o incluso penales’.

La formación ecologista también apunta que en suelo rústico de protección forestal ‘no es posible la construcción de un complejo deportivo de las dimensiones del parque acuático’, y el complejo deportivo y de ocio (parque acuático de Sierrallana)’ incumple el propio Plan General de Torrelavega, y la legislación del Suelo’. Se argumenta que el Plan General de Torrelavega clasificaba la zona contigua al hospital de Sierra Llana, donde aún subsiste el campo de rugbi, como una zona de equipamientos en suelo no urbanizable, es decir, exento de construcciones. Dice en su escrito EQUO Cantabria que “a tenor de lo regulado por el art. 113 la ley 2/2001 de Suelo de Cantabria, en suelo rústico de protección ordinaria no es posible la construcción de un complejo deportivo y de ocio de las dimensiones que se recogen en el anteproyecto; tan solo serían posibles las instalaciones deportivas o de ocio descubiertas sin asociarse a nuevas construcciones ni de edificios ni aparcamientos de nueva planta”.

Equo Cantabria dice además que este equipamiento ‘no ha sido previsto ni por el PGOU vigente ni por la Revisión del PGOU aprobado inicialmente, tal como se desprende de la lectura de la memoria y documentación aprobada recientemente’. ‘Si hubiera sido así el planificador, el Ayuntamiento de Torrelavega, lo habría detallado en la memoria o en las fichas urbanísticas, y ello solo habría sido posible hacerlo como equipamiento público en suelo urbano o urbanizable, y nunca en suelo rústico o no urbanizable que es la clasificación que siguen manteniendo los terrenos de Sierrallana’, señala.

El futuro PGOU ‘no permite la construcción de un equipamiento deportivo y de ocio en suelo clasificado suelo rústico ordinario y mucho menos en suelo rustico de especial protección forestal’ señala EQUO sobre las normas urbanísticas aprobadas inicialmente por el Ayuntamiento de Torrelavega.

EQUO Cantabria considera que no debe aplicarse la excepción de interés público (algo que tendría que ser declarado por la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente) pues ‘nos encontramos ante un proyecto que previsiblemente pase a manos privadas, con un destino que nada tiene que ver con servicios públicos esenciales que no pudieran tener otra ubicación distinta al suelo protegido de Sierrallana’.