Movilizaciones contra el Centro de Emprendedores / Archivo
La palabra «Chapuza» preside la valla de las obras, paralizadas, del Centro de Emprendedores en la finca de La Carmencita. Esa palabra parece un reflejo fiel de la situación real de una obra que, salvo la clase política, casi nadie considera necesaria.
Este proyecto, rechazado desde el principio por más de 3.000 firmas recogidas por la Asamblea contra el Centro de Emprendedores, necesita de las subvenciones europeas que requieren que el edificio esté terminado y recepcionado antes del 31 de diciembre del año 2015. Con estos plazos tan acuciantes, parece bastante claro que lo que antes era una probabilidad -la no construcción del Centro de Emprendedores- ahora es casi una palpable certeza.
Los gobernantes de Torrelavega explicarán, quizá en pocas semanas, la actual situación del proyecto, y es probable que echarán las culpas a las movilizaciones y a partidos políticos como ACPT del fiasco del proyecto, cuando la realidad es que el propio proyecto ha sido caótico desde su concepción y gestión.
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