El Ayuntamiento afirma que 2008 es el año con menor número de superaciones por sulfhídrico

El concejal de Medio Ambiente y Movilidad Urbana, Pedro Aguirre Inchaurbe, afirmó que los datos recogidos hasta septiembre "reflejan que el 2008 es el año con menor número de superaciones treintaminutales de ácido sulfhídrico (SH2) en Torrelavega" desde que se empezó a recoger información sobre la calidad del aire en la ciudad en el año 2000.

En lo que va de año, en la estación medidora de Barreda se han registrado 90 superaciones treintaminutales, mientras que en el mismo periodo del pasado año se habían producido 162, 12 en la de Minas y 1 en la del Zapatón.

En cuanto a superaciones en periodos de 24 horas, se registraron 3 en Barreda mientras que ni en el Zapatón ni en Minas se produjo ninguna. Con respecto a las partículas, en lo que va de año se han contabilizado 35 superaciones en Barreda (en el mismo periodo de 2007 fueron 53), 16 en Minas y 6 en el Zapatón.

Aguirre informó que en ninguna de las tres estaciones se supera el umbral máximo permitido, que se sitúa en 40 superaciones, ya que los valores medios en estos momentos son de 32, 24 y 27 respectivamente. Por último, las superaciones de SO2 en cuanto al valor límite horario (ya que en diario no hay nada que reseñar) ha sido de 7 en Minas, 4 en Barreda y ninguna en el Zapatón.

Pedro Aguirre recordó que estos datos son estudiados permanentemente por la Concejalía de Medio Ambiente, a través del servicio técnico industrial, y toda la información es puesta a disposición tanto de todos lo grupos políticos municipales como de todos aquellos colectivos que los quieran conocer.

Por otro lado, el concejal también informó de que, próximamente, comenzarán a instalarse en varios semáforos de la ciudad las nuevas ópticas de diodos led que sustituirán a las ya ineficientes de incandescencia. En concreto, se instalarán 607 ópticas en 31 puntos de la ciudad, lo que supondrá un ahorro energético anual superior a los cien mil kilowatios a la hora, además de un importante ahorro económico para las arcas municipales y una reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera de más de 66 toneladas al año.